sábado, 3 de octubre de 2009

Personajes de Feria. EL DE LA SENTENCIA






El feriante cofrade se lo curra: cuelga farolillos, pinta chapas, asa chorizos y acaba las noches de Feria abrazado a sus compañeros costaleros o trompetillas, marcando el pasito alante pasito atrás mientras en los altavoces de su caseta suena A ti Manué o Tus dolores son mis penas interpretados por la Banda del Sol. Ya digo que el cofrade feriero es un personaje trabajador, y a veces, incluso, cansino, sobre todo cuando explica la diferencia entre el costero y el contraguía o el porqué del habla bonita de los capataces. Pero de entre todos los feriantes cofrades toca hablar de los de La Sentencia.

¿Qué por qué? Pues porque se han currado una caseta de lujo en la que han instalado ese trocito del corazón de muchos ubetenses que es el Campamento de La Barrosa. Y allí, en medio del Recinto Ferial, están las tiendas en las que hemos dormido tantas veces, la lista de las cervezas de los monitores, el cajón de objetos perdidos, la Virgen de Guadalupe o el monumento desde el que Antonio Gutiérrez lo mira todo sonriente. ¡Hasta la Mesa del Pino han plantado los tíos en medio de la caseta! Y eso si que es un detalle: después de más años de la cuenta, gracias a ellos he podido volver a echarme un tercio en esa Mesa en la que tantos momentos buenos he dejado. Ya les digo: ni un detalle se les ha pasado a los de La Sentencia. Y es que cuando se proponen algo, se lo proponen en serio y lo consiguen, vaya si lo consiguen.

El cofrade de La Sentencia es un cofrade esencialmente serio y ligado a la vida de su hermandad –ejemplar vida cofrade– con lazos de hierro. Y además este año ha sido un cofrade terco: parecía que el tiempo para montar las casetas iba a dar sólo para poner tres chapas y dos mesas, y los setencieros –“palanganas” les llamaría cariñosamente uno que conozco– han montado el Campamento. Y han logrado que muchos nos emocionásemos al entrar en su caseta y ver allí al bueno de El Viejo y a su Chiquitilla del Gavellar, o la ropa en los tendederos, o las camisetas de tantos años. Y como el que escribo soy yo y como Alberto me deja escribir en su página lo que me da la gana, pues este artículo se lo tenía que dedicar a los de La Sentencia, esos grandes personajes de la Feria. (Cuando terminen de leer, dediquen unas palmas a la caseta campamento, porfi.)

(Publicado en Diario IDEAL el día 2 de octubre de 2009)

9 comentarios:

Javier dijo...

Felicidades a todos los de la Sentencia! Bonica feria estamos pasando en la mesa del pino! Más que aplausos, ovación.

Francisco Sierra dijo...

Buenos ratos y buenos tercios con Manolo Milina en la mesa del pino.

Perikiyo dijo...

Muchas gracias, de parte de un cofrade de La Sentencia.
Un abrazo.

Alfonso Donoso Barella dijo...

Hay veces que el corazón se siente dividido y eso provoca incertidumbre. Hoy, esta semana, esta feria mi corazón está, sigue, dividido y felizmente me siento orgulloso, hoy, esta feria, siempre, sigo pensando que muchas cosas merecen la pena, sigo viendo que JAC está muy dentro de mí, mi Señor en su Sentencia hace que siga queriendo vivir para querer, para ayudar, para dar sentido a todo.

Gracias Manolo por tu comentario.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Me uno a las palabras de Alfonso.
Este año me siento doble orgulloso de Mi Caseta, de Mi Campamento.

Solamente he podido estar 48 horas en la Feria este año y de ellas 40 muy cerca de la mesa del pino, en esa Manolo en la que nos tomamos nuestras primeras cervezas y primeros cafés y tantos ratos buenos pasamos junto al Viejo, Manolo Molina y tantos otros( mi adicción al café es culpa de Alfonso Donoso y de las partidas de dados de la siesta).

Te doy las gracias como Sentenciero que soy y doy las gracias a esta Cofradía por acercarme de nuevo al campamento después de tantos años de ausencia.

Un abrazo.

Monte.

Rafael Merelo dijo...

Muchas gracias por tus palabras, Manolo, yo por desgracia me la he perdido.

Manuel Madrid Delgado dijo...

Gracias por las gracias.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Pocas veces me gusta comentar las entradas a blogs, foros u otras "ciber-conversaciones", pero esta vez tus palabras me han calado en pleno centro del sentimentalismo tanto por lo que me une a la Cofradía, como por la parte que me toca po el campamento. Gracias Manolo a ti y a todos los de JAC por las alabanzas y por vuestra compañia. Luis Carlos ( pongo anonimo, porque mi nivel de conocimientos informaticos no me d para mas de eso de crear cuentas)

Pedro Ángel dijo...

Gracias a todo vuestro apoyo.

Ha sido un honor poder homenajear a aquel proyecto generoso y altruista que comenzó hace 50 años, y que por suerte, hoy sigue renovándose con sabia nueva.

Los que hemos sido parte del Campamento ha hecho que recordáramos años de niñez y juventud vividos en tiendas de campaña, a orillas de un mar inolvidable y rodeados de gente estupenda.

Gracias a ti y a todos los componentes de JAC que nos habéis visitado (casi instalado allí) y que nos habéis arropado. Mil gracias a vosotros.

Un fuerte abrazo desde los jaenes.